29 oct 2012

no quiero no estar a tu lado

Vuelve a ser lo que jamás cesó. Lo que no debió detenerse. Lo que no debimos romper. La dureza de lo frágil. Maquillar cicatrices con besos. Sentir cada uno de tus poros en un abrazo diferente cada vez. Ensamblé dos esencias de grafeno para emborracharme de tu olor todos los instantes, compro con millones tus miradas. Me regalo a tu posesiva conciencia y destruyo mi alma en un quejido para renacer dentro de ti. Envolvamos con cuidado y en silencio y a ciegas, el prodigio de lo que siempre tuvimos. Desgarremos la superficie para aprovecharnos de nuevo. Araño sin darme cuenta tu voz por sílabas, disfruto de tu pelo entre mis dedos y respiro tus pestañas antes de que parpadees. No daré tiempo al tiempo, pues es mío, es tuyo, es nuestro.

Concibo mi vida sin ti. No concibo plenitud ni felicidad completa ni a..  

26 oct 2012

Fugarme conmigo.


Esa tierra donde playa, cielo y monte
se unen en una simbiosis
del verde más verde,
donde más puro corre el aire,
donde brillan más las estrellas.

Allá donde los árboles se mecen
al son de tristes baladas otoñales,
y se estremecen con el silencio
de una noche de invierno fría.

El lugar en el que los sueños
corren a sus anchas,
ondean entre matorrales de espino,
entre oscuros cipreses
y laberintos de enredadera.

Es ese mundo aparte
en el que imaginar es vivir
y también viceversa.


Me gusta soñar(me) allí.
Lejos.
Conmigo.

Anochece

Es el crepúsculo la hora propia del escritor romántico. 
Es la oscura noche donde se refugia 
y dormita entre la bruma de sus pensamientos. 
Descansa de su incompleta vida mientras se sumerge 
en sus propias letras unidas por el zumbido de unos sentimientos 
que ya no saben si sienten, piensan, quieren o desean. 
Es la oscuridad lo que más teme y a su vez lo que más adora y venera. 


Todo es culpa del miedo. 


Grita. 
Llora. 
Patalea. 

Y entre balbuceos se queja. 

Se queja. 
Se queja. 


Quiere escapar, 
pero no se deja. 

No se deja.








9 oct 2012

Soy yoS.

De una gran sabia he aprendido algo hoy. Algo de lo que jamás me había dado cuenta, y que es tan genialmente perfecto que necesitaba contarlo donde fuera.

"Soy", primera persona del singular del presente de indicativo del verbo "ser", no es nada más y nada menos que un anagrama de "Yos"... Es tan simple y tan perfecto que no me había percatado. Soy = yoS. ¿Qué os parece? Esta relación está hecha especialmente para mí, pues no conozco persona, animal o cosa que sea más "yos" que yo misma. Pero ¿qué yo de todos es el que está tecleando estas cosas sin sentido? Es ese yo que sigue fundido en una niebla densa y fría, en una jauría de expectativas y sentimientos, en una nebulosa de canciones, rimas, pesares, y deseos. Es ese yo que no se siente a sí mismo el que escribe. Ese yo que no es tan yo como otros yos. Ese que no se conoce, ese yo que no quiere ser yo. Ese que yo no quiero y que al mismo tiempo amo, adoro y venero. Es la locura personificada. Es querer ser y no serlo. Ese yo no es más que el yo más mío, más extraño y perturbado. El que está al timón en este caso no es el yo majo, el yo risueño, el yo escandaloso y melodramático. Ese no es, no es este yo. Sino otros, otros que no son yo, y yo soy al mismo tiempo porque yo SOY todos esos YOS y ninguno a la vez. Es tan simple que es complicado. Todo se puede reducir al absurdo, y este terrible desdoblamiento de personalidades no iba a ser menos. SOY absurda, siempre lo he sabido, todos los YOS lo somos. Lo soy, digo.


Quiero saber si de verdad me disgusta o me gusta este estado de enajenación física y mental que me tiene abstraída del mundo. No sé cómo descubrirlo porque a veces lo odio tanto que lo amo con locura, y no puedo dejar de sumergirme en nuevos pensamientos alienados y ajenos a mi incumbencia por completo. Son pensamientos sin orden ni cuidado ni sentido ni significado. Son solo porciones pequeñas de un todo que no soy capaz de divisar. No sé si necesito ayuda profesional, si este tipo de locura se trata, pero por si acaso, sigo disfrutando de todo lo visible y lo invisible (como el libro aquel). Disfruto de mis incoherencias, paranoias y rarezas una por una, y me pregunto si hay alguien que me siga el ritmo en cuanto a demencia se refiere...

5 oct 2012

Nebulosa...

Llevo varios días en standby. No entiendo muy bien por qué ni tampoco sé cómo salir de este estado de neblinosa abstracción absurda. Me siento indefinida. Es raro. No siento mi piel, mis manos, mis órganos latentes, mis músculos, no siento nada. Soy una especie de ente incorpóreo y etéreo sumergido en un océano de células concretas. Es paradójico, es extraña y perfectamente paradójico. Paradójicamente perfecto. Soy concretamente abstracta. Y así soy capaz de divisar entre esa absurda nebulosa cada uno de los micropensamientos que conforman mi persona.

Hoy he corroborado mi teoría de los contrarios. La felicidad no existiría sin la tristeza, el amor sin el odio, los listos sin los tontos, la soledad sin la compañía, ni lo concreto sin lo abstracto. Eso está tan claro como que yo soy todo eso a la vez y que dentro de mí las posibilidades se multiplican por mil. Me siento triste cuando soy feliz, odio fervientemente amar de tal manera, me siento tonta cuando pienso demasiado, cuanta más gente hay a mi alrededor más sola está mi alma, y cuando me miro veo concretamente un ser abstracto. Asi es. Todo eso se mezcla en mi interior, y enemil cosas más que soy incapaz de plasmar con palabras...

¿Alguien que se ofrezca a aportarme un poco de luz en esta niebla densa que me encharca las ideas?
No, claro que no. ¿quién en su sano juicio iba a hacerlo?